RAZONES POR LAS QUE NUNCA DEBERÍAS VISITAR LA COSTA CARIBE COLOMBIANA

1. Hay un lugar donde lo mejor de la selva y del océano convergen: el Parque Tayrona. Y tienes miedo de enamorarte perdidamente de tanta naturaleza y luego no poder regresar a la monótona selva de cemento.



2. Tanto contraste de colores de las casas coloniales dentro de la imponente ciudad amurallada en Cartagena de Indias puede ser peligroso para tus pobres ojitos, acostumbrados a una paleta más monocromática.



3. Caminar hasta la increíble Ciudad Perdida en la Sierra Nevada de Santa Marta y conocer la cultura kogui puede ser demasiado para ti ya que… ¡corres el riesgo de conocer gente de todo el mundo en el camino!



4. Mejor no te acostumbres a los almuerzos de mojarra frita, arroz de coco y patacones a orillas de la playa… Luego, tener que comer un simple sandwich en tu casa te dejará con sabor amargo.



5. No querrás bailar, disfrazarte y gozar por varios días seguidos en el Carnaval de Barranquilla, la fiesta folclórica y cultural más importante de Colombia. Es que tus amigos se morirán de la envidia, y tú no quieres que sientan eso por ti…



6. Eres de los que prefiere los tratamientos llenos de químicos. ¿Qué es esto de un volcán de lodo? Mira lo maaaaal que la está pasando la señorita de la foto…




7. La gente de la costa colombiana es tan amable y divertida… que corres el riesgo de hacer grandes amigos, que querrás visitar una y otra vez.



8. ¿La Guajira colombiana? Te han dicho que se trata de dunas que terminan en playas increíbles, salares, flamencos y una cultura distinta. Pero te cuesta creer que esa combinación paradisíaca exista en este mundo…



9. Lo mejor de las palenqueras no es la gran variedad de dulces que venden, sino esa sonrisa amable y hermosa que te regalan. ¿Y si tu alma engorda con tanta bondad y alegría?



10. No te atreverías a nadar en San Andrés con peces y mantarrayas en aguas tranquilas y cristalinas. ¡Y mucho menos a alimentarlos!


11. ¿Ver un mar de siete colores? No creo que tu cerebro resista tantos estímulos sensoriales.



12. Y hablando de estímulos, ¿crees que tus caderas resistan moverse al ritmo de la alegre cumbia? Ese ritmo tan sabroso que después es casi imposible parar…



13. Visitar La Ronda del Sinú, en Montería, podrá ser el plan perfecto del domingo en familia… pero seguro los niños de la familia prefieren el sedentarismo y los juegos en línea, a pasar tiempo entre monos, osos perezosos e iguanas 😉



14. Experimentar de cerca todo lo que las distintas culturas indígenas tienen para ofrecer no es para ti. Es que eres de los que cree firmemente en que “mejor lo malo conocido que lo bueno por conocer”.



15. ¿Qué decir de sus artesanías? Hay tanta variedad y tan colorida que probablemente quieras comprarlo todo… Y en tu casa ya no cabe un alfiler… ¿o si?



16. Por supuesto hay tantas playas donde surfear… ¡que te tomará mucho tiempo escoger alguna para empezar a divertirte! Mmmm, mejor no vengas a la costa colombiana.